Trevín solicita al Principado una ley que regule la práctica del botellón - Cree que así se evitarían los problemas derivados del consumo de alcohol en las vías públicas.
- Nueve normativas autonómicas limitan el horario para la venta y prohíben las concentraciones.
El consumo libre de bebidas alcohólicas en la vía pública podría tener sus días contados en Asturias. Al menos si el Principado sigue la recomendación del delegado de Gobierno, Antonio Trevín, que ayer instaba al gobierno que preside Vicente Alvarez Areces al desarrollo de una ley autonómica que regule esta práctica, conocida popularmente como botellón. Para Trevín, la creación de un marco jurídico que regule el botellón ayudaría a "encauzar" los casos de ruido, suciedad y, en algunas ocasiones, comportamientos vandálicos, que se producen en las zonas en las que los jóvenes asturianos se reúnen para beber. El delegado de Gobierno apuntaba esta solución legislativa tras ser preguntado por los comportamientos violentos registrados en los últimos meses en las inmediaciones de la plaza del Cristal de Luanco, donde ya se ha registrado un apuñalamiento y un intento de violación con agresión física incluida. La petición llega dos años y medio después de que varios alcaldes asturianos señalasen la conveniencia de redactar una ley autonómica para controlar el botellón. Quien más incidió en ello fue el regidor de Siero, Juan José Corrales, que propuso además la participación para su desarrollo del sector vinícola y sidrero (y apoyo a los jóvenes en la celebración de Santa Isabel en Lugones). El camino a seguir, entiende el delegado del gobierno central en Asturias, es el que ya han iniciado otras comunidades autónomas. LOS PRECEDENTES
Cómo se regula el botellón en el resto de comunidades autónomas? Hasta el momento, se han aprobado nueve leyes autonómicas sobre el consumo de alcohol en la calle que pueden servir de base al Principado si sigue la recomendación de Antonio Trevín. Andalucía, Aragón, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, Madrid, Murcia y la Comunidad Valenciana se encuentran en este grupo de comunidades que ya han regulado esta práctica. La gran mayoría de las leyes existentes prohiben el consumo de alcohol en la vía pública, a excepción de las fiestas patronales y de las terrazas. Canarias, Cantabria, Castilla y León, Madrid y la Comunidad Valenciana añaden al consumo la prohibición de vender bebidas alcohólicas en estos lugares. El texto andaluz y el extremeño --que afectan a dos comunidades donde la asistencia a los botellones es mucho más numerosa que en Asturias-- son los dos únicos en los que se contempla la creación de espacios de ocio para la concentración de jóvenes por parte de los organismos públicos. En estos espacios el consumo de alcohol estaría permitido. Los casos de Aragón y Murcia son diferentes, porque sus leyes trasladan a las corporaciones municipales la responsabilidad de establecer ordenanzas que regulen el consumo y venta de bebidas alcohólicas. Por otra parte, algunos ayuntamientos han decidido actuar contra el botellón pese a que su comunidad autónoma carece de texto jurídico que lo contemple. El último ejemplo se ha dado en el Ayuntamiento de Pontevedra, que establece sanciones de hasta 3.000 euros para quien beba en la calle. Textos extraidos del periódico online:www.lavozdeasturias.es
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